viernes, 15 de abril de 2011

Rito de la Misa - www.maranatha.it - ​​Sestri Levante Génova Italia

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Rito de la Misa


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ORACIÓN EUCARÍSTICA V / a

Dios guía a su Iglesia

Esta plegaria eucarística forma un todo con su prefacio, que nunca puede cambiar. por lo tanto, no podemos decir cuando me recetó su Prefacio propio. Es especialmente adecuado para las masas "por diversas necesidades.


Es 's realmente justo darte gracias, Padre Santo,

Creador del mundo y fuente de vida.


Usted no nos deja solos en el viaje

pero que viven y trabajan entre nosotros.

Con su poderoso brazo guidasti

asamblea vagando en el desierto;

ahora acompañan a su iglesia,

peregrina en el mundo,

con la luz y la fuerza de su Espíritu,

a través de Cristo, tu Hijo, nuestro Señor,

nos guían por sendas de tiempo

el gozo perfecto de su reino.



Por estos dones inmensos,

junto con los ángeles y los santos,

cantamos el himno de tu gloria sin fin:



Santo, santo, santo.



T i te glorifique a ti, Santo Padre:

que siempre nos apoya en nuestro camino

especialmente en este momento en el que Cristo, tu Hijo,

que nos une a la Cena del Señor.

Él, como los discípulos de Emaús,

revela el significado de las Escrituras y parte el pan para nosotros.



Por favor, Padre todopoderoso,

envíe su Espíritu sobre este pan y este vino,

porque el Hijo está presente en nuestro medio

con su cuerpo y su sangre.



En la víspera de su pasión,

mientras estaban en la cena,

tomó el pan y dio gracias,

lo partió, lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomemos, y se lo comen:

esto es mi cuerpo

entregado por vosotros.



Del mismo modo, tomó la copa de vino

y dio gracias y la alabanza,

lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomad y bebed de ella:

éste es el cáliz de mi Sangre

y eterna alianza nueva,

derramada por vosotros y por todos

el perdón de los pecados.

Haced esto en memoria mía.



Misterio de la fe.



Anunciamos tu muerte, Señor,

proclamamos tu resurrección,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Cada vez que comemos de este pan

y beber esta copa;

os lo anunciamos tu muerte, Señor,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Tú nos has redimido con tu cruz y tu resurrección:

Sálvanos, oh Salvador del mundo.



En memoria de nuestra reconciliación,

proclamamos, Señor, la obra de tu amor.

Con la pasión y la cruz

hizo entrar en la gloria de la Resurrección

Cristo, tu Hijo,

y pidió a la derecha,

Rey inmortal de los siglos y Señor del universo.

Mire, Padre, esta oferta:

es Cristo que se entrega con su cuerpo y su sangre,

y con su sacrificio nos abre el camino hacia usted.

Dios, el Padre de la Misericordia,

nos da el Espíritu de amor, el Espíritu de su Hijo.



¡Fortalece a todos los convocados en la tabla:

junto con el Santo Padre (Nombre)

nuestro Obispo (Nombre)

sacerdotes, diáconos y todo el pueblo cristiano.

Puede irradiar confianza y alegría en el mundo

y caminar en la fe y la esperanza.



Recuerda también a nuestros hermanos

que murió en la paz de tu Cristo,

y todos los muertos que sólo la fe que ha conocido:

Admitir a disfrutar de la luz de tu rostro

y la plenitud de la vida en la resurrección.



Concédenos,

al final de esta peregrinación,

alcanzar la morada eterna, donde nos esperan.



En comunión con la Virgen Santísima,

con los apóstoles y mártires, y todos los santos,

elevamos nuestra alabanza a ti

en Cristo, tu Hijo, nuestro Señor.



Por Cristo, con Cristo y en Cristo,

a ti, Dios Padre omnipotente,

el Espíritu Santo,

todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos.

Amén.


ORACIÓN EUCARÍSTICA V / b

"NUESTRO CAMINO JESÚS

Esta plegaria eucarística forma un todo con su prefacio, que nunca puede cambiar. por lo tanto, no lo hacen. se da cuenta cuando se prescribe un prólogo adecuado. Es especialmente adecuado para las masas "por diversas necesidades.



Es 's realmente justo darte gracias,

Grande y misericordioso Dios,

que ha creado el mundo

y mantenerlos con gran amor.

Ves como el Padre de todas las criaturas

y se unen en una sola familia

hombres y mujeres creados para la gloria de su nombre,

redimidos por la cruz de su Hijo,

marcados por el sello del Espíritu.



Cristo, su Palabra viva,

es el camino que nos lleva a que,

la verdad que nos hace libres,

la vida que nos llena de alegría.

A través de él de levantar el himno de acción de gracias

estos regalos por su amabilidad

y la asamblea de los ángeles y los santos

proclamará tu alabanza:



Santo, Santo, Santo ...



T i te glorifique a ti, Santo Padre:

que siempre nos apoya en nuestro camino

especialmente en este momento en el que Cristo, tu Hijo,

que nos une a la Cena del Señor.

Él, como los discípulos de Emaús,

revela el significado de las Escrituras y parte el pan para nosotros.



Por favor, Padre todopoderoso,

envíe su Espíritu sobre este pan y este vino,

porque el Hijo está presente en nuestro medio

con su cuerpo y su sangre.



En la víspera de su pasión,

mientras estaban en la cena,

tomó el pan y dio gracias,

lo partió, lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomemos, y se lo comen:

esto es mi cuerpo

entregado por vosotros.



Del mismo modo, tomó la copa de vino

y dio gracias y la alabanza,

lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomad y bebed de ella:

éste es el cáliz de mi Sangre

y eterna alianza nueva,

derramada por vosotros y por todos

el perdón de los pecados.

Haced esto en memoria mía.



Misterio de la fe.



Anunciamos tu muerte, Señor,

proclamamos tu resurrección,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Cada vez que comemos de este pan

y beber esta copa;

os lo anunciamos tu muerte, Señor,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Tú nos has redimido con tu cruz y tu resurrección:

Sálvanos, oh Salvador del mundo.



En memoria de nuestra reconciliación,

proclamamos, Señor, la obra de tu amor.

Con la pasión y la cruz

hizo entrar en la gloria de la Resurrección

Cristo, tu Hijo,

y pidió a la derecha,

Rey inmortal de los siglos y Señor del universo.

Mire, Padre, esta oferta:

es Cristo que se entrega con su cuerpo y su sangre,

y con su sacrificio nos abre el camino hacia usted.

Dios, el Padre de la Misericordia,

nos da el Espíritu de amor, el Espíritu de su Hijo.



Fortalecer su pueblo con la sangre de tu Hijo,

y nos renueva a su imagen.

Bendice a nuestro Papa ...

nuestro Obispo ...

y todo nuestro pueblo.

Todos los miembros de la iglesia

capaces de reconocer los signos de los tiempos

y constantemente contratar el servicio del Evangelio.



Haz que seamos abiertos y disponibles

nuestros hermanos y hermanas que nos encontramos en nuestro camino,

porque compartimos el dolor y la angustia,

los gozos y esperanzas

y el progreso a lo largo del camino de la salvación.



Recuerda también a nuestros hermanos

que murió en la paz de tu Cristo,

y todos los muertos que sólo la fe que ha conocido:

Admitir a disfrutar de la luz de tu rostro

y la plenitud de la vida en la resurrección.



Concédenos,

al final de esta peregrinación,

alcanzar la morada eterna, donde nos esperan.



En comunión con la Virgen Santísima,

con los apóstoles y mártires, y todos los santos,

elevamos nuestra alabanza a ti

en Cristo, tu Hijo, nuestro Señor.



Por Cristo, con Cristo y en Cristo,

a ti, Dios Padre omnipotente,

el Espíritu Santo,

todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos.

Amén.

ORACIÓN EUCARÍSTICA V / c

"MODELO DE JESÚS DE AMOR

Esta plegaria eucarística forma un todo con su prefacio, que nunca se puede cambiar: por lo tanto, no podemos decir cuando me recetó su propio Prefacio. Es especialmente adecuado para las masas "por diversas necesidades.



Es 's realmente justo darte gracias,

Padre misericordioso:

nos diste a tu Hijo, Jesucristo,

nuestro hermano y redentor.



En él han expresado su amor
para los pequeños y pobres,
por los enfermos y los marginados.
Nunca se cerró
necesidades y el sufrimiento de los demás.
Con la vida y las palabras
anunció al mundo que usted es un padre
y el cuidado de todos sus hijos.



Por estos signos de tu bondad

te alabamos y te bendecimos
y unidos a los ángeles y los santos
cantar el himno de tu gloria:

Santo, Santo, Santo ...



T i te glorifique a ti, Santo Padre:

que siempre nos apoya en nuestro camino

especialmente en este momento en el que Cristo, tu Hijo,

que nos une a la Cena del Señor.

Él, como los discípulos de Emaús,

revela el significado de las Escrituras y parte el pan para nosotros.



Por favor, Padre todopoderoso,

envíe su Espíritu sobre este pan y este vino,

porque el Hijo está presente en nuestro medio

con su cuerpo y su sangre.



En la víspera de su pasión,

mientras estaban en la cena,

tomó el pan y dio gracias,

lo partió, lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomemos, y se lo comen:

esto es mi cuerpo

entregado por vosotros.

Del mismo modo, tomó la copa de vino

y dio gracias y la alabanza,

lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomad y bebed de ella:

éste es el cáliz de mi Sangre

y eterna alianza nueva,

derramada por vosotros y por todos

el perdón de los pecados.

Haced esto en memoria mía.



Misterio de la fe.



Anunciamos tu muerte, Señor,

proclamamos tu resurrección,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Cada vez que comemos de este pan

y beber esta copa;

os lo anunciamos tu muerte, Señor,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Tú nos has redimido con tu cruz y tu resurrección:

Sálvanos, oh Salvador del mundo.



En memoria de nuestra reconciliación,

proclamamos, Señor, la obra de tu amor.

Con la pasión y la cruz

hizo entrar en la gloria de la Resurrección

Cristo, tu Hijo,

y pidió a la derecha,

Rey inmortal de los siglos y Señor del universo.

Mire, Padre, esta oferta:

es Cristo que se entrega con su cuerpo y su sangre,

y con su sacrificio nos abre el camino hacia usted.

Dios, el Padre de la Misericordia,

nos da el Espíritu de amor, el Espíritu de su Hijo.



Fortalecer su gente

con el pan de la vida y el cáliz de la salvación,

hacernos perfectos en la fe y el amor

en comunión con el Papa ...

y nuestro Obispo ... ..



Danos ojos para ver

las necesidades y el sufrimiento de los demás,

Danos la luz de tu palabra

para consolar a los afligidos y oprimidos:

Hace 'que nos involucramos en la buena fe

servir a los pobres ya los que sufren.

Su iglesia es un testimonio vivo de la verdad y la libertad,

la justicia y la paz,

que todos los hombres

abierta a la esperanza de un mundo nuevo.



Recuerda también a nuestros hermanos

que murió en la paz de tu Cristo,

y todos los muertos que sólo la fe que ha conocido:

Admitir a disfrutar de la luz de tu rostro

y la plenitud de la vida en la resurrección.



Concédenos,

al final de esta peregrinación,

alcanzar la morada eterna, donde nos esperan.



En comunión con la Virgen Santísima,

con los apóstoles y mártires, y todos los santos,

elevamos nuestra alabanza a ti

en Cristo, tu Hijo, nuestro Señor.

Por Cristo, con Cristo y en Cristo,

a ti, Dios Padre omnipotente,

el Espíritu Santo,

todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos.
Amén.

ORACIÓN EUCARÍSTICA V / d

LA IGLESIA EN EL CAMINO A LA UNIDAD "

Esta plegaria eucarística forma un todo con su prefacio, que nunca se puede cambiar: por lo tanto, no podemos decir cuando me recetó su propio Prefacio. E 'es especialmente adecuado para las Misas por diversas necesidades.



Es 's realmente justo darte gracias,

y aumentar,
Señor, Padre amoroso,
el himno de bendición y de alabanza.

A través de su Hijo,
esplendor de la gloria eterna, hecho hombre por nosotros,
que se han reunido todas las naciones en la unidad de la Iglesia.
Con el poder de su Espíritu
continuar reuniendo en una misma familia de los pueblos de la tierra,
y se ofreció a todas las personas
la bendita esperanza de tu reino.
Por lo tanto, la Iglesia brilla
como un signo de su fidelidad a la "alianza ll
promesa y realizado en Cristo Jesús Señor nuestro.



Por este misterio de la salvación
Alabo a los cielos y la tierra se regocije
por unanimidad y la Iglesia canta la gloria:



Santo, Santo, Santo ...



T i te glorifique a ti, Santo Padre:

que siempre nos apoya en nuestro camino

especialmente en este momento en el que Cristo, tu Hijo,

que nos une a la Cena del Señor.

Él, como los discípulos de Emaús,

revela el significado de las Escrituras y parte el pan para nosotros.



Por favor, Padre todopoderoso,

envíe su Espíritu sobre este pan y este vino,

porque el Hijo está presente en nuestro medio

con su cuerpo y su sangre.

En la víspera de su pasión,

mientras estaban en la cena,

tomó el pan y dio gracias,

lo partió, lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomemos, y se lo comen:

esto es mi cuerpo

entregado por vosotros.



Del mismo modo, tomó la copa de vino

y dio gracias y la alabanza,

lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomad y bebed de ella:

éste es el cáliz de mi Sangre

y eterna alianza nueva,

derramada por vosotros y por todos

el perdón de los pecados.

Haced esto en memoria mía.



Misterio de la fe.



Anunciamos tu muerte, Señor,

proclamamos tu resurrección,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Cada vez que comemos de este pan

y beber esta copa;

os lo anunciamos tu muerte, Señor,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Tú nos has redimido con tu cruz y tu resurrección:

Sálvanos, oh Salvador del mundo.



En memoria de nuestra reconciliación,

proclamamos, Señor, la obra de tu amor.

Con la pasión y la cruz

hizo entrar en la gloria de la Resurrección

Cristo, tu Hijo,

y pidió a la derecha,

Rey inmortal de los siglos y Señor del universo.

Mire, Padre, esta oferta:

es Cristo que se entrega con su cuerpo y su sangre,

y con su sacrificio nos abre el camino hacia usted.

Dios, el Padre de la Misericordia,

nos da el Espíritu de amor, el Espíritu de su Hijo.



Hace "que la Iglesia ...

ser renovada a la luz del Evangelio.

Se fortalece el vínculo de la unidad

entre los laicos y sacerdotes,

entre nuestro obispo y los sacerdotes ...

entre los obispos y nuestro Papa ...;

en un mundo desgarrado por la discordia

su iglesia brillar un signo profético de unidad y paz.



Recuerda también a nuestros hermanos

que murió en la paz de tu Cristo,

y todos los muertos que sólo la fe que ha conocido:

Admitir a disfrutar de la luz de tu rostro

y la plenitud de la vida en la resurrección.



Concédenos,

al final de esta peregrinación,

alcanzar la morada eterna, donde nos esperan.



En comunión con la Virgen Santísima,

con los apóstoles y mártires, y todos los santos,

elevamos nuestra alabanza a ti

en Cristo, tu Hijo, nuestro Señor.



Por Cristo, con Cristo y en Cristo,

a ti, Dios Padre omnipotente,

el Espíritu Santo,

todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos.

Amén.

Plegaria Eucarística

CONCILIACIÓN DE LA
Reconciliación como un retorno al Padre



De la Oración Eucarística de la Reconciliación arrojar luz sobre los temas de la acción de Dios para la conversión y la renovación de la humanidad. Cada uno de los dos forman un conjunto, por lo que no se da cuenta cuando se prescribe sólo el prefacio.



Es verdaderamente justo darte gracias,

Santo Padre, el Dios de infinita bondad.

Usted continúa llamar a los pecadores para renovar su Espíritu

y mostró su omnipotencia

sobre todo en la gracia del perdón.

Muchas veces las personas han roto su pacto,

en vez de abandonarlos a su suerte y tiene un estrecho vínculo con su nuevo

a través de Jesús, tu Hijo y nuestro Redentor:

un vínculo tan fuerte que nada se rompa.

También ofrecemos un momento de la reconciliación y la paz,

debido a confiar únicamente en tu misericordia

encontrar su camino de regreso a ti,

y esperando que el Espíritu Santo, vivir la vida nueva en Cristo,

perennes en alabanza de su nombre y servicio de los demás.

Ese es el misterio de tu bondad,

en la maravilla y la alegría de la salvación que se encuentran,

nos unimos al inmenso coro de los ángeles y los santos

para cantar tu gloria:

Santo, Santo, Santo ...



Padre santo de hecho,

desde el principio del mundo

Usted nos tenga parte en su designio de amor,

para hacernos santos como Santo eres.


Mira a la gente reunida a su alrededor

y envía tu Espíritu,

por los dones que hemos

convertido en el Cuerpo y la Sangre +

tu Hijo amado, Jesucristo,

en la que también nosotros somos sus hijos.


Estábamos muertos a causa del pecado

y no puede acercarse a ti,

pero nos han dado

la prueba suprema de su misericordia,

cuando tu Hijo, el único justo,

ha puesto en nuestras manos

y se dejó clavado en la cruz.

Antes de aplicar los brazos entre el cielo y la tierra,

como signo de alianza eterna,

Él quería celebrar la Pascua con sus discípulos.

Mientras cenaban, Jesús tomó un pan

y dio gracias y la alabanza,

lo partió, lo dio a ellos y les dijo:



Tomemos, y se lo comen:

esto es mi cuerpo

entregado por vosotros.



Después de la cena, de la misma manera,

sabiendo que todo se habría reconciliado

la sangre derramada en la cruz,

tomó la copa de vino y dio gracias de nuevo,

lo dio a sus discípulos, y dijo:



Tomad y bebed de ella:

éste es el cáliz de mi Sangre

y eterna alianza nueva,

derramada por vosotros y por todos

el perdón de los pecados.

Haced esto en memoria mía.



Misterio de la fe.



Anunciamos tu muerte, Señor,

proclamamos tu resurrección,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Cada vez que comemos de este pan

y beber esta copa;

os lo anunciamos tu muerte, Señor,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Tú nos has redimido con tu cruz y tu resurrección:

Sálvanos, oh Salvador del mundo.



En la memoria

la muerte y resurrección de tu Hijo,

Nuestra Semana Santa y asegurar nuestra paz,

esperando el día bendito

de su venida al final de los tiempos,

ponemos a su disposición, fiel y verdadero Dios, el sacrificio

la conciliación de su amor a la humanidad.


Mira, Señor, que tu familia

reunión que

el sacrificio de tu Cristo,

y nos dará el poder del Espíritu Santo,

debido a que ganó cada división y la discordia

nos hemos reunido en un solo cuerpo.



Guardia a todos en comunión de fe y amor

con nuestro Papa N.
y nuestro Obispo N.

Ayude a construir juntos su reino

hasta el día en que nos presentamos ante usted en su casa,

Santos entre los santos

con la Virgen Santísima,

los Apóstoles [San N. o patrona del día]

y nuestros hermanos muertos

que encomiendo a tu misericordia.

Luego, en la nueva creación,

finalmente liberada de la corrupción de la muerte,

cantar el himno de acción de gracias

que va a usted de su vida a Cristo para siempre.



Por Cristo, con Cristo y en Cristo,

a ti, Dios Padre omnipotente,

el Espíritu Santo,

todo honor y gloria

por los siglos de los siglos.

Amén.

Plegaria Eucarística

RECONCILIACIÓN II
La reconciliación con Dios el fundamento de la armonía humana



Es sólo para agradecer y glorificar a Usted,

Dios todopoderoso y eterno,

por el maravilloso trabajo de la redención

en Cristo nuestro Salvador.

Reconocemos tu amor paternal

veces cuando la dureza del hombre,

y en un mundo desgarrado por la guerra y la discordia

abierta a la reconciliación él.

Con el poder del Espíritu que actúa dentro de los corazones,

porque los enemigos comienzan a hablar,

adversarios dándose la mano

y las personas que se encuentran en armonía.

Por su regalo, el padre,

la búsqueda sincera de la paz extinguido contención,

vence el amor el odio

la venganza y el perdón es desarmado.

Y nosotros, junto con los ángeles, los cantantes de su gloria,

levante con alegría el himno de bendición y de alabanza:



Santo, Santo, Santo ...



Te bendecimos, Dios todopoderoso,

Señor del cielo y la tierra,

a través de Cristo, tu Hijo Jesús que vino a su nombre:

Él es la mano que se extiende a los pecadores,

la palabra que nos salva,
el camino que nos conduce a la paz.

Todo lo que se han alejado de usted,

pero tú, oh Dios, nuestro Padre,

se extendió a todo hombre;

con el sacrificio de tu Cristo,

condenado a muerte por nosotros,
nos lleva de vuelta a su amor,

Debido a que nos entregamos a nuestros hermanos.


Ese es el misterio de la reconciliación

por favor, santificar

por la efusión del Espíritu Santo

estos dones que la Iglesia ofrece,

+ Obediente a las órdenes de su Hijo.



Él se adelantó a dar la vida

por nuestra liberación,

y la cena, tomó el pan en sus manos,

le dio las gracias y la alabanza,

lo partió, lo dio a sus discípulos, y dijo:

Tomemos, y se lo comen:

esto es mi cuerpo

entregado por vosotros.



Del mismo modo, en esa última noche,

tomó la copa

engrandecido tu misericordia,

lo dio a sus discípulos y les dijo:



Tomad y bebed de ella:

éste es el cáliz de mi Sangre

y eterna alianza nueva,

derramada por vosotros y por todos

el perdón de los pecados.

Haced esto en memoria mía.



Misterio de la fe.



Anunciamos tu muerte, Señor,

proclamamos tu resurrección,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Cada vez que comemos de este pan

y beber esta copa;

os lo anunciamos tu muerte, Señor,

Cristo vendrá de nuevo.



O bien:

Tú nos has redimido con tu cruz y tu resurrección:

Sálvanos, oh Salvador del mundo.



En la memoria

la muerte y resurrección de tu Hijo,

le ofrecemos, Padre, el sacrificio de la reconciliación,

que nos ha dejado como muestra de su amor

y que usted mismo ha puesto en nuestras manos.


También nos acepta, Padre Santo,

junto con su oferta de Cristo,

y la participación en este banquete eucarístico

Danos tu Espíritu,

ya que se elimina todo obstáculo en el camino hacia la armonía,

y la Iglesia brille entre los hombres

como un signo de unidad y un instrumento de tu paz.



El Espíritu, que es el vínculo de la caridad,

velar por nosotros en la comunión

con nuestro Papa N.,
nuestro Obispo N.,

el Colegio de los Obispos
sacerdotes, diáconos

y todo el pueblo cristiano.

Bienvenido a tu reino a nuestros hermanos,

que se han dormido en el Señor,

y todos los muertos que sólo la fe que ha conocido.

Nos has llamado alrededor de tu mesa,

recoger en perfecta unidad

la gente de toda raza y lengua todos los,

junto con la Virgen María,

con los Apóstoles y todos los santos

banquete en la nueva Jerusalén,

para disfrutar de la plenitud de la paz para siempre.



Por Cristo, con Cristo y en Cristo,

a ti, Dios Padre omnipotente,

el Espíritu Santo,

todo honor y gloria

por los siglos de los siglos.

Amén.


RITO DE COMUNION

Obediente a la palabra del Salvador y tamaños para su enseñanza, nos atrevemos a decir:

Pater Noster

Padre nuestro que estás en los cielos,

Santificado sea tu nombre;
Venga tu reino, hágase tu voluntad,

como en el cielo así en la tierra.
Danos hoy nuestro pan de cada día;

Y perdónanos nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a nuestros deudores;
Y no nos dejes caer en tentación, mas líbranos del mal.

Líbranos, Señor, de todos los males,

concédenos la paz en nuestro tiempo;

y con la ayuda de tu misericordia,

vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa,

la venida de nuestro Salvador Jesucristo.

Para el reino, el poder

y la gloria para siempre.

Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles:

"La paz os dejo, os doy mi paz",

No tengas en cuenta nuestros pecados,

pero la fe de tu Iglesia,

y concédenos la paz y la unidad de acuerdo a tu voluntad.

Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.

La paz del Señor esté siempre con vosotros.
Y con tu espíritu.

CORDERO DE DIOS
Cordero de Dios que quita los pecados del mundo, ten piedad de nosotros.

Cordero de Dios que quita los pecados del mundo, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quita los pecados del mundo, danos la paz.


El sacerdote dice:

Señor Jesucristo, Hijo del Dios viviente,

la voluntad del Padre y el Espíritu Santo

con tu muerte la vida al mundo,

por el misterio santo de su cuerpo y su sangre,

líbrame de todo pecado y todo mal,

que sea siempre fiel a su ley

y nunca se separa de ti.



O bien:

La comunión de tu cuerpo y tu sangre,

Señor Jesucristo,

no se convierta en mi condena,

pero por tu misericordia,

remedio es para defender el alma y el cuerpo.

Luego pasa a mostrar la Hostia consagrada:

Dichosos los invitados a la Cena del Señor.
He aquí el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo.

Junto con la asamblea, el sacerdote dice:

Oh Señor, no soy digno de que entres, pero "sólo una palabra y me sanará.

El Cuerpo de Cristo.
Amén.

ORACIÓN

RITO DE CONCLUSION

El Señor esté con vosotros.
Y con tu espíritu.

Bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Amén.

La Misa ha terminado, vete en paz.
Gracias a Dios!

O bien:

- La alegría del Señor es nuestra fuerza. Vete en paz.

- ¡Glorifica al Señor con su vida. Vete en paz.

- En el nombre del Señor, vete en paz.



El domingo de Pascua:

- Ve a traer toda la alegría del Señor resucitado.



Gracias a Dios

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